Doctor Enerio Rodríguez Arias
Presidente de la Comisión Electoral de la UASD
Candidatos y candidata a la Rectoría de la UASD
Señores y señoras
Amigos y amigas:
Acudo
a este espacio institucional, presidido por la Comisión Electoral, para
expresar las ideas de Acción Renovadora Universitaria (ARU), así como las
mías, en torno al presente y futuro de la UASD, siempre en el interés de
contribuir al cambio, la renovación e innovación de la Academia, a la que he
servido, durante más de 30 años, y que ahora, a mucho orgullo aspiro a dirigir
durante el periodo 2018-22.
¿Qué
haré cuando sea Rector de la UASD?
Haré
lo pertinente, para convertir en realidad los cambios que conecten con la
calidad académica, la transparencia y el prestigio social. Cada
miembro de la familia universitaria andará con la frente erguida, honrado de
pertenecer a la Primada de América.
Aglutinaremos un
gran bloque de fuerzas y personalidades académicas, con solvencia
moral, que contribuyan a su transformación, de cara a los requerimientos
de la sociedad dominicana y la dinámica de los conocimientos que se vienen
desarrollando en el mundo. Conocer y actuar para renovar la academia es nuestro
lema.
Coloco
mi mirada en el horizonte de los cambios necesarios, que enmarco en las cuatro
transformaciones siguientes: 1. La reforma del entendimiento, 2. La reforma
académica, 3. La reforma ética y 4. La reforma gerencial-institucional.
Dando
un paso más, proclamo la necesidad de diseñar un Pacto Académico,
que supere el status quo vigente en la UASD (mezcla de
orden-desorden), que a su vez, abra las posibilidades de cambiar las
relaciones UASD-Sociedad, UASD-Estado-Gobierno. Esto supone un
diálogo permanente, fluido y transparente, entre esos componentes del
desarrollo social dominicano.
Hay
que salir del círculo vicioso en que estamos atrapados desde hace 35 años, la
sociedad dominicana y el mundo cambiaron, y cuando eso acontece, las
universidades, que están insertas en esa realidad, tienen que moverse, y con
prisa, porque si no quedan rezagadas, se llenan de impertinencias,
obsolescencias, que les impiden cumplir con su razón de ser, es decir, con su
visión, misión y valores. Se impone, en consecuencia, una reforma profunda,
cero apariencias, que nos prepare para el mundo en que estamos, y que a su
vez, permita asumir sin temor los desafíos del porvenir.
Creo
en la crítica, con criterio, y en el derecho innegociable, que tenemos de
expresar libremente las ideas, pero por favor, hagámoslo con
fundamento y seriedad, para que el ejercicio de esta práctica le
proporcione a la institución sus efectos
benéficos. No soy partidario del conformismo, que se
adapta a las circunstancias, y no cuestiona los males internos de la
UASD y del país. En ese sentido, milito en las filas del optimismo objetivo,
que rechaza el pesimismo, conducente al derrotismo y a la
mala idea de que la Universidad Autónoma de Santo Domingo no tiene arreglo. Hagamos
los cambios nosotros, para que no lleguen desde fuera.
De
aquí mi gran llamado a los que aman la UASD, creen en su viabilidad y su
necesidad social, en tanto faro de luz de la nación dominicana, y como el más
idóneo medio de promoción y desarrollo social de los sectores más deprimidos de
la sociedad. El paréntesis abierto, durante los años 60, no sólo debe
continuar, hay que ampliarlo, y para eso es necesario (este es el llamado),
pensar la universidad, con el objetivo de renovar las vocaciones y compromisos
con la sociedad dominicana, superar sus impertinencias y distorsiones
académicas y administrativas, en fin, crear un orden , donde el trabajo
creador, la disciplina, el reconocimiento del mérito, la rendición
cuentas y la transparencia ética, atraviesen beneficamente la vida
institucional de la UASD.
Una
vez electo rector, removeré cielo y tierra para colocar la
Universidad Autónoma de Santo Domingo en la agenda nacional, y lo haré a base
de propuestas que contribuyan al desarrollo de la República Dominicana.
Naturalmente, primero hay que poner la casa, las cosas y la
cabeza en orden, tomando las medidas siguientes:
1-
Que
los ideales de calidad, transparencia y trabajo constituyan el norte de la
UASD.
2-
Aplicar
los estatutos y reglamentos como garantía de orden y disciplina en
la institución.
3- Recuperar
como ejercicio pertinente y necesario la crítica de los males
sociales, acompañadas de las necesarias propuestas al desarrollo
nacional.
4- Cancelar
aquellos que no realicen un servicio útil y que cobren sin
trabajar (asesores, enlaces, conexas, etc.).
5-
Aplicar
la baja estudiantil.
6-
Ponerle
un límite provisional a las carreras del mercado masificadas.
7-
Propiciar
un proceso de acompañamiento y seguimiento a las labores que se realizan en la
UASD (docencia, investigación, extensión, conexas, licencias, sabático,
contrataciones, y por supuesto el ejercicio de la autoridad).
8-
Prohibir
la creación de nuevos centros universitarios y fortalecer los que existen.
9-
Propiciar
que la UASD siempre esté abierta cumpliendo con su visión y misión
estatutarias.
10-
Sancionar
a todos los que cometan actos inmorales y se aparten de la visión y la misión
que nos dan razón de ser.
11-
No
permitir desórdenes, capuchas y personas extrañas en el campus universitario.
12-
Cambiar
la percepción que la sociedad dominicana tiene de la UASD.
13-
Fuero
y autonomía consciente y responsable.
14-
Consensual
con la sociedad y el Estado los cambios necesarios.
15-
Descentralización
total de los Centros Regionales.
16-
Llamar
a concurso público y contradictorio los puestos de la UASD.
17-
Prohibir
las campañas electorales a destiempo y transparentar el uso de recursos.
18-
Cambiar
la forma de elección de las autoridades.
Finalmente, señores y señoras, seré Rector, para que la Primada, fundada en 1538,
en una pequeña isla del Caribe antillano, un día se transforme, gracias al trabajo y
la dedicación de sus hombres y mujeres, en la Primera de América.
Muchas Gracias,
Rafael Morla
Candidato a Rector 2018-22.
Santo Domingo 15 de febrero, 2018.
0 Comentarios